Jueves, 7 Marzo 2019 - 2:15pm
Huaraz en Línea.- Una periodista, como productora de radio establece una relación de trabajo con alguien que es más poderoso que ella. Tiene 17 años de experiencia como congresista. Es un hombre que goza de prestigio en la prensa y fama de ayudar a causas justas. Se deslumbra y alegra de que sea su amigo.
Lo conoces y de inmediato te alegra saber que tu agenda telefónica de trabajo, se suma el contacto de un congresista más. Ni más ni menos.
Solo lo has visto dos veces en tu vida, cuando fue a dos entrevistas en la radio donde trabajabas. Has conversado en persona de modo breve. Repito, solo lo has visto dos veces en todo el tiempo que lo has conocido.
Eventualmente conversas con él por la red whatsapp de todo un poco: política, anécdotas, nada importante. De hecho, el congresista confunde tu nombre de vez en cuando. Pero te alegra tener la amistad con un político cuyo futuro es expectante. Tan expectante que espera ser candidato a la presidencia en el 2021. Así de expectante es su futuro.
Hasta que un día te escribe a la medianoche por la red whatsapp y te dice “Hola”. Como periodistas y jóvenes promesas de toda la vida, les debo decir que nosotras, podemos conversar con un político y cualquier fuente potencial de madrugada, de día, fiestas de guardar y demás fechas importantes del calendario.
Por ello, no nos debe extrañar que la periodista le conteste el saludo al congresista, sin que eso signifique que le dé pie a decir lo que vino después. ¿Y que vino después?.
Todos ustedes lo han leído, el congresista en cuestión, del partido “Acción popular” acosa sexualmente a la periodista, quién ofuscada y con razón, le reclama al día siguiente el mensaje.
El congresista de “Acción popular” le responde con algo inverosímil: mi teléfono móvil lo tomó alguien y escribió ese mensaje, seguidamente le pidió disculpas reiteradas.
Así las cosas, la periodista y el congresista retomaron comunicación, un mes después, cuando ella lo felicita por el triunfo a la alcaldía de Lima de Jorge Muñoz, con el partido “Acción popular”.
Saludos van, saludos vienen. Hasta que el congresista vuelve a la carga contra la periodista. Le pide una entrevista y de ahí, se olvida de sus disculpas anteriores, y vuelve a acosarla. Ahora sí, no se justificó diciendo que alguien había tomado su teléfono móvil.
¿Hay un manual para reaccionar a un acoso? Reírnos de nervios, soltar frases tontas o no decir nada, no significa ni aquí en la China, legitimar la agresión del congresista contra la periodista.
Luego de la segunda agresión contra la periodista, el congresista busca a su manera resarcir la falta y le ofrece trabajo en la bancada parlamentaria de “Acción popular” con miras a las elecciones del 2021.
La periodista deja de contestarle las llamadas de whatsapp y con ello, le deja en claro su negativa a trabajar con él, luego del acoso sexual del que fue víctima.
Hasta aquí los hechos. La periodista se toma su tiempo en hacer la denuncia. Cada víctima se toma su tiempo en hacer la denuncia. No hay ningún manual que le exija a uno hacer la denuncia, al minuto siguiente de la agresión. No contestar, no bloquear el teléfono o no hacer nada, no invalida la agresión. Tampoco invalida la agresión ser mayor de 40 años, estar en pareja o tener hijos.
Y de pronto el acoso sexual.
La denuncia de la periodista contra el congresista de “Acción Popular” se realiza después de las denuncias contra los congresistas Moisés Mamani (setiembre de 2018) y Luis López Vilela (diciembre de 2018) de acoso sexual.
¿Por qué recién se habla del acoso?. ¿Es que acaso recién empezó el acoso sexual a fines del 2018?. Según la especialista, Jeannette Llaja, el acoso sexual ha existido siempre, solo que recién desde el12 de setiembre del año pasado, se aprueba en el congreso el delito de acoso sexual.
“Tres casos de acoso en 4 meses. ¿Recién acosan? No, recién nos queda claro que está mal acosar”; señala Jeannette Llaja.
La periodista que denunció al poderoso congresista se reunió en enero con el presidente del Congreso, Daniel Salaverry; y las congresistas Tania Pariona y Paloma Noceda. Estaba aterrada y con razón, toda persona que denuncia un tema de acoso sexual, así de complejo, se expone a recibir un baño de lodo y nadie está preparado para ello.
Por un lado, la periodista quiere que se haga justicia. Nosotros como país, debemos empezar a aprender que toda denuncia de acoso sexual es compleja, y que no hay un protocolo de pasos que seguir cuando se denuncia a alguien. También debemos aprender que si bien somos un país donde vivimos dentro de una estructura machista, las mujeres estamos peleando desde nuestros espacios para que los niños del futuro no perpetúen las diferencias que mamamos desde que nacemos.
Lo increíble del caso de la periodista contra el congresista de “Acción popular”, es que hay muchos congresistas hombres que se sintieron aludidos cuando el periodista Erick Sánchez anuncio que se venía una denuncia de acoso sexual contra un legislador.
Todos los aludidos, muy poderosos ellos, buscaron sus mensajes y temblaron por unos días porque se sabían culpables, al recién notar que sus conversaciones con algunas de sus colaboradoras y las periodistas que cubren el Parlamento pueden ser tipificadas como acoso sexual.
Pero aún sus denunciantes no se atreven a hacerlo. Ya llegará su momento, cuando las víctimas se sientan listas. El remezón será inmenso. Vaya que sí.
Habla Paloma Noceda, la denunciante de López Vilela
La congresista Paloma Noceda conversó con “OtraMirada” a tres meses de haber denunciado en el Hemiciclo a su colega, Luis López Vilela. Vivió en carne propia lo que es hacer una denuncia de acoso sexual:
-¿Por qué crees que, en lugar de pedir explicaciones al denunciado, se ataca a la mujer que denuncia un caso de acoso?
Porque vivimos en una sociedad machista, en la cual la mujer siempre es juzgada y la ven como responsable de las actitudes del agresor, cómo si la mujer provocase todo el tiempo o tuviera que sentirse halagada por el comportamiento del agresor. Es terrible y es una situación que tenemos que cambiar por el futuro y bienestar de nuestras niñas.
-¿Cómo ha cambiado Paloma Noceda luego de haber denunciado por acoso a un colega en el Congreso?
En el plano personal, desde el día en que hice pública la situación que me tocó vivir, pude sanar y sentirme liberada, porque antes, cada vez que recordaba el tema, sentía que se repetía la sensación de repulsa que esa situación me generó. En el plano político, el día en que hice pública la denuncia no pensé en la repercusión que iba a tener, en la que muchas mujeres se sintieron identificadas, por lo cual estoy aún más comprometida en trabajar por los derechos de la mujer.
-Si una mujer que es víctima de acoso en una situación donde el hombre es más poderoso, ¿qué consejos le darías para que haga su denuncia?
¡Que no tenga miedo! Que actualmente el acoso está tipificado en el código penal como un delito, que el responsable va a responder a la justicia sin importar su cargo, ni la posición que ejerza. Les diría a las mujeres que tenemos derecho a vivir en un ambiente de tranquilidad, a caminar y sentirnos seguras. Nadie tiene el derecho de faltarnos el respeto ya sea por un tocamiento indebido, palabras subidas de tonos, llamadas o mensajes con connotación sexual, etc.
En el Congreso, hay tres legisladores con denuncias de acoso ¿por qué crees que no se dan los pasos para que las leyes protejan a las mujeres que se atreven a denunciar?
Actualmente tenemos legislación que protege a las mujeres que se atreven a denunciar el acoso, este delito ya se encuentra tipificado en el código penal gracias a la Decreto Legislativo N° 1410, que incorporó el delito de acoso, acoso sexual, chantaje sexual y difusión de imágenes, materiales audiovisuales o audios con contenido sexual al código en mención. Si no existiese esta normativa, difícilmente las mujeres se atreverían a denunciar y sería casi imposible que se haga justicia a favor de las víctimas.
-¿Cómo crear entornos seguros para las niñas y adolescentes que crecen en un sistema machista?
Considero fundamental la educación en este tema, tanto la que proviene de nuestra casa como la de la que nos brinda las instituciones educativas. Debemos enseñarles a nuestros niños a reconocer conductas incorrectas, a brindarles información sobre los canales de denuncia. Además, es necesario empoderar a las niñas a que reconozcan las conductas y si se sienten incómodas, puedan hablar y que se les crea. Desde mi despacho he presentado un proyecto de ley sobre escuela de padres, para que las instituciones educativas ayuden a generar conciencia a los padres de familia, que muchas veces no saben cómo criar a sus hijos. (Por: Paola Ugaz – Otra Mirada.pe)
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