Huaraz en Línea.-“Justicia que tarda, ya no es justicia”, reza un viejo adagio y al parecer ello está ocurriendo en el distrito de Ranrahirca en la provincia de Yungay, porque las autoridades (Dra. Lissbeth Adriazola Begazo) de la Fiscalía Penal Corporativa de Yungay y la Policía Nacional del Perú vienen dilatando el tiempo para sancionar a los responsables de la brutal agresión con desfiguración de rostro a los jóvenes comuneros Alejandro Espinoza Bailón y Filomeno Menacho Lázaro, ocurrido el pasado 15 de octubre del presente año en horas de la madrugada, cuando salían de las festividades por el aniversario del distrito de Ranrahirca, según denunció el presidente del Comité de Lucha de las comunidades campesinas del lugar, Antolín Rodríguez Roque.
El dirigente comunal al tiempo de precisar que las diversas comunidades de la zona se vienen organizando, ya que vienen dilatando innecesariamente las investigaciones y sanciones a los responsables de la desfiguración de rostro con botellas de cerveza y objetos punzo cortantes, cometidos según los testigos por el docente de la Institución Educativa “Santo Domingo de Guzmán” de Yungay, Neri Armando Caballero Vilcarino de 63 años y sus hijos Marlon Alex Caballero Mejía de 24 años y Max Caballero Mejía.
“Para los pobres no hay justicia, estos dos jóvenes comuneros salían luego de disfrutar de un baile social por el aniversario del distrito frente a la municipalidad de Ranrahirca y fueron agredidos brutalmente por este docente del colegio Santo Domingo y por sus hijos, quienes estaban libando licor en la calle.
Les desfiguraron la cara y ocasionándole la pérdida del ojo izquierdo a Filomeno Menacho, además fueron golpeados brutalmente porque tienen cortes causados por botellas de cerveza y otros elementos punzo cortantes, tienen cortes en la cara, cuello, cabeza, oreja y brazos”, manifestó el dirigente comunal Antolín Rodríguez Roque.
Además informó que ante la demora en las investigaciones y falta de sanciones a los responsables, que haría notar algún tipo de influencia extra judicial, las comunidades campesinas de Ranrahirca y de distritos aledaños se han organizado en un comité de lucha, quienes están exigiendo el cumplimiento de las leyes a la fiscal y a la Policía Nacional del Perú y que los responsables de la agresión vayan a la cárcel, porque dañaron de por vida a dos jóvenes comuneros de Yungay.
Precisó que no es posible, que pese a los testimonios de los testigos del hecho que sindican a los agresores y a los vídeos de la cámara de la municipalidad de Ranrahirca, además de los antecedentes violentos, los agresores el profesor Neri Armando Caballero Vilcarino y sus hijos Marlon Alex Caballero Mejía y Elmo René Caballero Mejía no sean sancionados con todo el peso de la ley.
Rodríguez Roque en tal sentido precisó que los comuneros de Ranrahirca y Yungay están preparando sendas movilizaciones hacia la fiscalía y Policía Nacional del Perú para exigir justicia, “justicia que los pobres nunca tienen”, finalizó.
Ante este lamentable suceso ocurrido el pasado 15 de octubre del año en curso, donde en la Carpeta Fiscal se consignan declaraciones de testigos, evaluaciones del médico legista, videos, entre otros, las autoridades judiciales en aplicación del Nuevo Código Procesal Penal deben de sancionar al docente y a sus violentos hijos, responsables de la desfiguración de rostro e intento de homicidio a dos jóvenes comuneros yungainos, sin esperar todavía que las comunidades tomen la justicia en sus manos, según el plazo que le han dado a la fiscal para la detención preventiva.
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