Huaraz en Línea.- En un acto proselitista y populista terminó la denominada Fiesta Ancashina, organizada por el Gobierno Regional de Áncash.
El propio gobernador regional, Waldo Ríos se dio un baño de popularidad regalando pescado a los cientos de asistentes procedentes de las diferentes provincias y distritos de la región, que llegaron hasta Huaraz para solicitar presupuesto para sus obras y proyectos.
Mientras tanto, al lado este de la plaza de armas, los cientos de ciudadanos identificados con la lucha del comité anticorrupción exigían el cumplimiento de las promesas del excandidato de Puro Áncash, entre ellas la entrega de los 500 soles, la creación de grifos así como las universidades y hospitales.
Al término de la movilización y marcha no se reportó mayores incidentes salvo algunos actos aislados de parte de los seguidores del gobernador regional.
El sobrino y ex personero legal de Waldo Ríos, Josué Salcedo entregó gaseosas a los asistentes quienes portaban banderolas del mismo color y con el logo uniforme de la agrupación Puro Áncash, así como polos con las letras “Yo amo a Waldo”.
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