Huaraz en Linea.- Luego de la exposición de los casos de infidelidad por parte de dos conocidos conductores de televisión (aún casados), mucha gente se ha empezado a cuestionar y polemizar sobre los motivos por los cuales una persona es infiel y por qué existen tantos triángulos amorosos en una sociedad.
Esta situación, que no es exclusiva de las personas que gozan de fama o que son parte de la farándula, se genera por una serie de motivos internos y externos que un ser humano toma en cuenta para decidir quebrar el compromiso de exclusividad con su pareja.
“La infidelidad no tiene un solo motivo. Podemos pasar de nunca haber tenido la intención de ser fiel hasta factores como la inseguridad personal e inestabilidad emocional”, mencionó Liliana Funegra Morales, especialista en psicología y docente de la Universidad César Vallejo (UCV+).
Para la Dra. Funegra, el acto de infidelidad afecta no solo a la pareja, sino a todo el entorno familiar. Esto debido a que se ha quebrado la confianza tanto con la pareja como con los hijos (en caso de tenerlos).
“Muchas veces un episodio de infidelidad crea un clima de desconfianza y rencor. Las relaciones se vuelven conflictivas, el clima en casa será tenso, en ocasiones podría tornarse violento; los hijos van a tomar parte de estas peleas e incluso llegar a formar bandos, en apoyo de la persona lastimada”, señaló Funegra, quien recalcó que, en las relaciones con hijos, esto puede afectar su comportamiento, por lo que se debe prestar mucha atención a la reacción que tienen sobre el tema y no involucrarlos.
¿Qué sucede con la tercera persona en la relación?
Si bien es cierto la pareja es quien debe respetar a su esposa o esposo, y es responsable directo de una infidelidad, la tercera persona, protagonista en el triángulo amoroso, muchas veces se involucra al tener conocimiento de la situación sentimental del otro.
“Cuando una persona decide ser parte de un triángulo amoroso, muchas veces puede ser por falta de madurez, por características personales o por enamoramiento. Hay quienes se emparejan con hombres o mujeres casadas porque les prometen divorcios o separaciones y aguardan la esperanza de que al final se queden juntos. En cualquiera de las situaciones, hay un autoengaño para continuar en ese triángulo amoroso”, mencionó la especialista de la UCV.
La doctora explica también que las personas que han cometido un acto de infidelidad hacen a un lado el respeto, la lealtad, honestidad y el compromiso. Una buena gestión en su autocontrol puede significar una llamada de atención interna que ayude a reflexionar antes de actuar.
“Lo más importante es la voluntad y el compromiso de querer tener un proyecto de pareja y de familia. Entender que, si existe algún problema difícil de solucionar, es importante tener la iniciativa y acudir a un especialista. Recordemos que una relación quebrada sólo puede reconstruirse con respeto y una comunicación emocional permanente”, finalizó Funegra.
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