Huaraz en Línea.- Debido al alto peligro que representa para la población de Huaraz el desborde de la laguna Palcacocha, de origen glaciar de la Cordillera de los Andes, el Instituto Nacional de Investigación en Glaciares y Ecosistemas de Montaña (INAIGEM) está coordinando con el gobierno regional de Áncash para tener los términos de referencia que permitan analizar y contar con estudios definitivos sobre su comportamiento.
Así lo dio a conocer el director del INAIGEM, Ricardo Villanueva, y añadió que dicha institución ha puesto parte del presupuesto y personal para hacer las investigaciones en dicho ámbito, pues un desborde dicha laguna, localizada en la provincia de Huaraz, podría afectar también el Callejón de Huaylas y la cuenca del Río Santa.
En declaraciones a la agencia Andina, Villanueva sostuvo que Palcacocha, la laguna emblemática en la Cordillera Blanca, distante a 22 kilómetros de Huaraz, se desbordó en 1941 causando la muerte de más de 4,000 personas. Ese día, gran bloque de hielo se desprendió de uno de los dos glaciares que alimentan a la citada laguna, provocando un alud de lodo y piedras que sepultó al 60 % de la ciudad.
“En esta zona aluviónica vive mucha gente y hay mucha infraestructura. La laguna ha crecido 34 veces desde 1970, llevando a varias declaraciones de estado de emergencia. Es un peligro latente declarado incluso por la Presidencia del Consejo de Ministros que ha tomado cartas en el asunto”, anotó.
Precisó que el 31 de mayo de este año y el primero de junio último, se tuvo un evento de desprendimiento de hielo en el frente glaciar Pucaranra sobre la laguna Palcacocha, que produjo un oleaje de 3 metros aproximadamente. También originó el colapso del sistema de sifones, la desestabilización de las plataformas de trabajo que se tienen en la laguna, y se destruyó el sistema el sistema de monitoreo que vienen implementando.
La laguna Palcacocha, localizada sobre los 4562 metros sobre el nivel del mar, bajo las cumbres de Palcaraju y del Pucaranra, suministra agua a toda la ciudad Huaraz.
“Se afectó el sensor automático construido por el INAIGEM y que se piensa replicar en otros lugares. Este sistema de monitoreo nuevamente ha sido instalado y parte del sistema de sifones igualmente está funcionando”, explicó.
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